domingo, 10 de abril de 2011

Proceso psicosexual de un gay durante la adolescencia

Articulo extraido de FAMIPED

Llevo suponiendo que soy gay desde los 10 años, aproximadamente, pero no ha sido hasta los 17 cuando lo he asumido conscientemente.

La cuestión es que, aunque parezca que la sociedad ya se ha modernizado y este tema lo tenemos totalmente aceptado, la realidad es mucho más dura para el adolescente gay.

Yo empecé fijándome en algunos chicos, sin saber si lo que sentía por ellos era amor o era sólo una amistad más fuerte de lo normal, pero no tardé en darme cuenta de que la amistad no era suficiente para explicar lo que sentía.

Según iban pasando los años, la idea iba haciéndose más incómoda. Cada vez estaba más claro, pero había algo a lo que me agarraba: de pequeño, en la edad en la que se supone que la orientación sexual no está aun claramente definida, también había sentido algo por las chicas.

Sin embargo esa excusa se volvía cada vez más falsa y más forzada. ¿Por qué me seguía agarrando a ello? ¿De qué tenía miedo? Pues, efectivamente, de algo tenía miedo... Nadie, al menos en mi entorno y grupo de amigos, veía como algo admirable, ni siquiera normal, ser gay. No era una opción más, no era algo natural con gente admitiendo que lo era; desde luego, tenía connotaciones negativas.

Creo que esa es la realidad que no debemos esquivar, que debemos tener muy en mente: lo habitual, aún hoy en día, es que el admitir la homosexualidad lleve integrado un componente de dolor, un componente traumático.

Se hizo un estudio en Estados Unidos y la verdad es que el resultado daba bastante vértigo... El índice de depresión entre jóvenes gays era mucho mayor que entre heterosexuales, hasta el punto de que era casi lo más habitual, y el índice de suicidio era el triple que entre heterosexuales...

¿Qué ocurre con esta cuestión? ¿Por qué sigue siendo tan difícil ser gay hoy en día? Creo que uno de los factores que hacen aun más difícil el avance, es que se puede esconder... He pasado por heterosexual sin levantar sospecha hasta los 18 años, y una cuestión que me he planteado muchas veces es: si a los 15 años, en un acto de valentía, hubiese declarado mi homosexualidad en público, en mi entorno, en el colegio o en mi grupo de amigos, ¿no habría animado eso a otros chicos gays que hubiese cerca de mí con mi mismo problema? He sabido de varios compañeros míos de clase que también salieron del armario más tarde... y, sinceramente, me hubiera gustado hablar del tema con ellos cuando éramos más jóvenes. De hecho, si hubiéramos sabido lo nuestro unos de otros, no creo que hubiera sido difícil que hubiéramos acabado en el mismo grupo de amigos, compartiendo los sentimientos difíciles y labrándonos una adolescencia y un paso a la edad adulta mucho más “sanos”, más sanos por el hecho de tener figuras parecidas cerca, por el hecho de considerar nuestra “circunstancia” algo normal, y no sentirnos los únicos del mundo con el “problema”.

Hoy, hecho finalmente el “acto de valentía” a los 18 años (más vale tarde que nunca), mi mejor terapia ha sido descubrir que hay mucha gente que acepta perfectamente mi condición; en mi caso he tenido suerte, pues mi familia y mis amigos lo han aceptado sin problema, y ha sido, desde entonces, cuando me he sentido más “completo”.

Creo que deberíamos preocuparnos un poco más por nuestros pequeños, y darles “pistas”, mostrarles que pueden ser gays, hablarles de ello a tiempo, para que lo vean como normal, y, según las estadísticas, podremos salvar del sufrimiento a uno de cada diez chavales, que, probablemente, sientan atracción por su mismo sexo.

Para gente interesada en contactar conmigo, alexander.sacristan@gmail.com

1 comentario:

  1. creo que yo tengo el mismo problema que tu pues tengo 11 casi 12 y siento una fuerte atraccion asia mi mismo sexo lo cual me confunde y varios amigos mios lo saben y lo aceptan pero no se si es por la confucion en mi etapa o porq , asi soy

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